viernes, 24 de mayo de 2013

NEVERLAND :)


¿Quién no ha soñado con volver a ser niño? ¿Qué niño no ha soñado con crecer? Ummm... Yo hace algunos años tuve la suerte de conocer a un niño que es un caso aparte. Él no quería crecer, porque sabía lo que el futuro deparaba a los adultos: Responsabilidades, escepticismo, y lo que es peor... !NO CREER EN NUNCA JAMÁS! Que no se entere Peter de que no creéis en él, porque puede aparecer en tu habitación buscando su sombra!

-¿Cómo te llamas? -preguntó él.
-Wendy Moira Angela Darling -replicó ella con cierta satisfacción-. Y tú, ¿cómo te llamas?
-Peter Pan.
Ella ya estaba segura de que tenía que ser Peter, pero le parecía un nombre bastante corto.
-¿Eso es todo?
-Sí -dijo él con aspereza. Por primera vez le parecía que era un nombre algo corto.
-Cómo lo siento -dijo Wendy Moira Angela.
-No es nada -masculló Peter.
Ella le preguntó dónde vivía.
-Segunda a la derecha -dijo Peter-, y luego todo recto hasta la mañana.
-¡Qué dirección más rara!
Peter se sintió desalentado. Por primera vez le parecía que quizás sí que era una dirección rara.



¿CREER EN LAS HADAS?

La segunda a la derecha y todo recto hasta la mañana. Ése, según le había dicho Peter a Wendy, era el camino hasta el País de Nunca Jamás...
Al sentir que Peter regresaba, el País de Nunca jamás revivió de nuevo. Deberíamos emplear el pluscuamperfecto y decir que había revivido, pero revivió suena mejor y era lo que siempre empleaba Peter.
Normalmente durante su ausencia las cosas están tranquilas. Las hadas duermen una hora más por la mañana, los animales se ocupan de sus crías, los pieles rojas se hartan de comer durante seis días con sus noches y cuando los piratas y los niños perdidos se encuentran se limitan a sacarse la lengua. Pero con la llegada de Peter, que aborrece el letargo, todos se ponen en marcha otra vez. Si entonces pusierais la oreja contra el suelo, oiríais cómo la isla bulle de vida.
-Mira, Wendy, cuando el primer bebé se rió por primera vez, su risa se rompió en mil pedazos y éstos se esparcieron y ése fue el origen de las hadas.
Era una conversación aburrida, pero a ella, que no conocía mucho mundo, le gustaba.
-Y así -siguió él afablemente-, debería haber un hada por cada niño y niña.
-¿Debería? ¿Es que no hay?
-No. Mira, los niños de hoy en día saben tantas cosas que dejan pronto de creer en las hadas y cada vez que un niño dice: «No creo en las hadas», algún hada cae muerta.



VOLAR

¿Cuántos de vosotros habéis soñado que volábais? Aquí está la solución, pensamientos positivos y un puñado de polvo de hada :)

-Wendy. Wendy, cuando estás durmiendo en esa estúpida cama podrías estar volando conmigo diciéndoles cosas graciosas a las estrellas.
-Oye, Peter, ¿de verdad sabes volar?
En vez de molestarse en contestarle Peter voló por la habitación posándose al pasar en la repisa de la chimenea.
-¡Estupendo! -dijeron John y Michael.
-¡Encantador! -exclamó Wendy.
-¡Sí, soy encantador, pero qué encantador soy! -dijo Peter, olvidando los modales de nuevo.
Parecía maravillosamente fácil y lo intentaron primero desde el suelo y luego desde las camas, pero siempre iban hacia abajo en vez de hacia arriba.
-Oye, ¿cómo lo haces? -preguntó John, frotándose la rodilla. Era un chico muy práctico.
-Te imaginas cosas estupendas -explicó Peter-, y ellas te levantan por los aires.
Se lo volvió a demostrar.
-Lo haces muy rápido -dijo John-, ¿no podrías hacerlo una vez muy despacio?
Peter lo hizo despacio y deprisa.
-¡Ya lo tengo, Wendy! -exclamó John, pero pronto descubrió que no era así. Ninguno de ellos conseguía elevarse ni una pulgada, aunque incluso Michael dominaba ya las palabras de dos 
sílabas, mientras que Peter no sabía ni hacer la O con un canuto.

Claro que Peter les había estado tomando el pelo, pues nadie puede volar a menos que haya recibido el polvillo de las hadas. Por suerte, como ya hemos dicho, tenía una mano llena de él y se lo hechó soplando a cada uno de ellos, con un resultado magnífico.

-Ahora agitad los hombros así -dijo-, y lanzaos.
Estaban todos subidos a las camas y el valiente Michael se lanzó el primero.
No tenía realmente intención de lanzarse, pero lo hizo e inmediatamente cruzó flotando la habitación.
-¡He volado! -chilló cuando aún estaba en el aire.
John se lanzó y se topó con Wendy cerca del cuarto de baño.
-¡Maravilloso!
-¡Estupendo!
-¡Miradme!


Para despedir esta entrada... Una de mis citas favoritas de este mágico libro...

-Pero, Campanilla, ¿cómo te atreves a beberte mi medicina?
Pero ella no contestó. Ya estaba tambaleándose en el aire.
-¿Qué te ocurre? -exclamó Peter, asustado de pronto.
-Estaba envenenada, Peter -le dijo ella dulcemente-, y ahora me voy a morir.
-Oh, Campanilla, ¿te la bebiste para salvarme?
-Sí.
-Pero, ¿por qué, Campanilla?
Las alas ya casi no la sostenían, pero como respuesta se posó en su hombro y le dio un mordisco cariñoso en la barbilla. Le susurró al oído:
-Cretino.

J.M. Barrie.
                                          
                                                                                                    Believe in magic. 

                                                                                                                          Jess.

7 comentarios:

  1. Me encantaa!!! He recorado la escena de la pelicula entera y con las voces de ellos. Es muy buena peli y muy buena entrada. Ole disney y ole tu

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  2. ¡Muy buena entrada!

    La historia que a todos nos ha leído mamá alguna vez antes de ir a dormir.

    ¿Quién no imaginaba que, cuando se apagaba la luz de la lámpara, campanilla estaba revoloteando por la habitación?

    J. M. Barrie nos ha hecho soñar tantas veces con ésta historia... Me encantaría visitar los Jardines de Kensington, en Londres, para hacerle una foto a la estatua de Peter Pan que construyeron en su honor...

    "La bendita locura de ser Peter Pan..." - El mejor veneno. RYLC

    ¡Besotes de pre-finde!

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  3. Me encanta Peter Pan!! Es una de las mejores pelis de Disney!
    Es verdad lo que dices, yo de pequeña quería volar como Peter, Wendy o Campanilla.
    Me encanta la entrada de hoy! :-)
    Un besito.

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  4. Bonita entrada para intentar hacer memoria de mi niñez, a veces pienso que no he tenido, pero algo recuerdo... de ese tipo de pelis que enseñaban bastante.
    Yo he vuelto del pais del nunca jamás y he perdido la habilidad de volar, he vuelto para reencontrarme con mi hada que se llevo los polvos magicos,que me hacian volar... un seguno que lo apunto a ver si sale algo para escribir jajaja. A volar todo el mundo lo mas arriba posible que en las nubes se vive bien, besaaaaazos

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  5. Ohh, ¡qué bonita entrada!
    Jo, cuánto tiempo hará desde que vi Peter Pan por última vez... Me has hecho hacer memoria con esos fragmentos.
    De pequeña yo también quería volar como lo hacían ellos. Ahora me doy cuenta que hay muchas formas de volar. :)
    ¡Un besazo!

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  6. Yeah, buena forma de recordar! ¡Muy bonita entrada! Es triste pero recordaba más esta película por videojuegos que por la propia película. Sí, matadme xD

    Me gusta esta parte especialmente:

    "-Te imaginas cosas estupendas -explicó Peter-, y ellas te levantan por los aires."

    Porque cuando estamos tristes también son cosas que nos gustan las que nos hacen "volar".

    Un beso grande!

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  7. Gracias chicos! Me alegra que os haya gustado esta entrada :)
    Besazo a todos!!!
    We can fly :D

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