domingo, 16 de junio de 2013

A la caza de Brujas....

Caza de brujas: La ejecución en la hoguera

El castigo máximo para las brujas era la muerte en la hoguera. Esta se convertía casi siempre en un espectáculo supuestamente edificante, pues las llamas acababan no sólo con la vida de las reas sino también con sus pecados, purificados de este modo.
Las condenadas que se «arrepentían» en el último momento eran estranguladas.
También se dieron casos en que, antes de quemarlas, a algunas brujas impenitentes se les cortaron sus miembros o se les machacó el cuerpo en el potro.

 

Caza de brujas: El recurso a la tortura

La tortura, en teoría, debía utilizarse sólo cuando existían pruebas de que un reo había cometido un crimen y se negaba a confesarlo.

En la práctica, sin embargo, se aplicó a menudo sin restricciones, lo que resultó decisivo para condenara muchas brujas que, de este modo, confesaron lo que los jueces querían oír acerca de los crímenes que se suponía habían cometido.
Entre otros métodos de tortura, destaca la garrucha, que consistía en colgar al reo por las muñecas de una polea con pesas sujetas a los pies.
La víctima se alzaba lentamente, y luego se la soltaba de un tirón para dislocar sus miembros.

Caza de brujas: Declaración o interrogatorio

Al reo se le concedía el derecho a una audiencia o declaración, en la que los jueces escuchaban su versión frente a la acusación del fiscal.
Se suponía que los jueces estaban obligados a conceder dichas audiencias siempre que el acusado lo solicitara.
Pero en los interrogatorios a las acusadas de brujería el fin era obligarlas a confesar que habían renegado de Dios, habían asistido al aquelarre y habían copulado con el Demonio, además de ser causantes de múltiples desgracias acaecidas en su comunidad, como muertes, enfermedades, pérdidas de la cosecha por tormentas que ellas mismas habrían provocado, etc.

Caza de brujas: Acusación y detención

Un proceso podía iniciarse de tres maneras: tras una acusación de parte (en la que el acusador debía probar lo que decía), tras una delación o denuncia (efectuada a partir de simples sospechas suscitadas por el comportamiento del acusado o acusada), o como resultado de una pesquisa o inquisición.
En este último caso, el tribunal actuaba ex oficio, es decir, por propia iniciativa. A veces se combinaban los dos últimos métodos, de modo que muchas acusadas de brujería fueron detenidas y presas sin necesidad de pruebas de sus supuestos delitos y, en ocasiones, sin que ellas mismas supieran el motivo por el que habían sido denunciadas.

Este tema me encanta, y mas en la época que mas auge tuvo que fue la edad media, a mi siendo sincero, si hubiese vivido en esa época me hubiese gustado ser una bruja, eso si haber pasado desapercibida y haber hecho mis hechizos a todo bicho viviente muajajaja… aun así se que en esa época hubieron muchas personas que fueron quemadas y eran inocentes, todo por esas acusaciones anónimas por el mero hecho de utilizar hierbas medicinales, ayudar a las personas con ciertas medicinas, ya te tachaban de bruja por que eras capaz de hacer lo que otros no podían  Bueno doraemones espero que os haya gustado este blog mágico  y ser buenos brujos y brujas. 

9 comentarios:

  1. menos mal que ya no existe eso por que tal y como estan las cosas estariamos todos acusando a todos de brujería jajajaja, buen documento josillo, un besoooooooote.

    ResponderEliminar
  2. jejejej... la verdad ke no me importaria ke a mas de uno lo hechizaran de por vida... ejjeje un besito pakito y cuidate mucho wapo ke ya dentro de poco te veo

    ResponderEliminar
  3. Es muy fuerte que se posria hacer esas cosas pero bueno eran otras epocas
    Muy buena entrada amor

    ResponderEliminar
  4. Bueno! Afortunadamente ya no existe esta práctica injusta y cruel.
    Una buena entrada, Jose! Muy de acuerdo con tus palabras :)
    Beso!!!

    ResponderEliminar
  5. Sabía de la existencia de la "Caza de brujas", pero no como se llevaba a cabo... En esa época se creía en muchas supercherías.
    Pues sí, menos mal que ya no existe eso, porque madre mía...
    Buena entrada, Jose. ;)
    ¡Un besazo!

    ResponderEliminar
  6. Todos los años disfrazándome de bruja y sin saber de todo esto?
    Interesante entrada! :)
    No sabia de la existencia de la caza de brujas... *_*
    Un beso grande! ^^

    ResponderEliminar
  7. Por cierto! Acorde a esta entrada, aprovecho para recomendaros un libro relacionado con la caza de brujas que me resultó muy interesante e instructivo cuando lo leí :) "Ars Magica" de Nerea Riesco ;)
    Muuuá!

    ResponderEliminar
  8. Tuve ocasión, cuando estuve al otro lado del charco, de visitar la ciudad de Salem. Allí se llevó a cabo la mayor caza de brujas de la historia. Menos mal que, por suerte, no se sigue practicando esa tortura. Es realmente sorprendente cómo en épocas pasadas el hombre se ha dejado llevar tanto por la superstición.

    Caldero, pata de conejo, ancas de rana...

    ¡Un besito hechizado!

    ResponderEliminar
  9. os recomiendo dicho libro "las brujas de salem" y otro ke me lei hace poco "en el tiempo de las hogueras" son bastante buenos y te comentan como muchas inocentes murieron por culpa de poder ser como eran... bss

    ResponderEliminar